viernes, 18 de noviembre de 2011

Crónica de un robo anunciado


El 15 de marzo del 2008 se enfrentaron en pelea de desempate el campeón Mexicano Juan Manuel Márquez y el ídolo Filipino Manny Pacquiao, la pelea fue muy cerrada, al igual que la primera cuatro años antes donde el resultado fue un justo empate. Márquez visito la lona en el tercer round algo determinante en la decisión de los jueces pero domino la mayoría de los rounds al final una decisión dividida a favor del Tagalo, un decisión polémica, donde la mayoría vio ganador a Márquez, rápidamente se hicieron las gestiones para una revancha, se le hizo la mejor oferta hasta el momento de su carrera a Pacquiao, pero este la rechazo, todos queríamos la revancha directa menos Pacquiao, su entrenador Roach y su promotor Bob Arum.

A partir de esa noche la carrera del Filipino dio un giro enorme, empezó a escalar divisiones y a ganar campeonatos de forma increíble, derroto a rivales que meses atrás se pensaba imposible, grandes nombres se añadieron a su record, en cada pelea se le notaba más fuerte, más rápido, más resistente, con una estamina interminable, se convirtió en el rey del PPV, dicto las condiciones del boxeo actual y las bolsas de los combates, el Filipino estaba en la cúspide de su carrera.

Márquez después de ese segundo combate y ante la negativa de un tercero se estableció en los pesos ligeros, teniendo brillantes actuaciones y siempre después de cada victoria pedía una pelea más con Pacquiao, Juan Manuel cambio un poco su forma de pelear, arriesgo mas lo que le trajo mejores bolsas y más fanáticos, se aventuro a subir a los welter a desafiar a Floyd Mayweather Jr., pero Márquez lucio fatal, lento, gordo y sin pegada, fue borrado del ring por el Norteamericano.

 A pesar del gran éxito en su carrera Pacquiao tenía algo pendiente, algo que sus aficionados y el mundo del boxeo en general le pedían, le exigían, derrotar categóricamente al último hombre que le puso los guantes encima, Márquez se había convertido en la piedra en el zapato de Pacquiao y había que sacarla, querían borrar el fantasma del Capitalino y así tener una carrera inmaculada donde el Filipino no dejara dudas, por fin después de 3 años y 8 meses decidieron hacer ese esperado tercer combate.

La pelea se pacto para el pasado sábado 12 de noviembre, pocas posibilidades le dábamos al Mexicano, las principales razones, los 38 años de edad de Márquez, el gran momento y las exhibiciones devastadoras del Filipino donde lucia inmenso y poderoso, pero sobre todo las 9 libras que Márquez tenía que subir para dar las 144 libras como máximo pactadas, las mismas de 2 años atrás contra Mayweather Jr. quizá una de las razones por las que el team Pacquiao se animo a un tercer combate,  la mesa estaba lista, Manny solo tenía que sentarse y deleitarse con el banquete que Arum le había servido, nada ni nadie echaría a perderlo.

Era tan evidente la superioridad de Pacquiao en el boxeo actual que solo se vislumbraba un nombre que pudiera derrotarlo arriba del ring y en la generación de dinero, alguien que estuviera a la par y que se mostrará igual de dominante ante sus rivales, esa persona es el invicto Floyd Mayweather Jr., varias veces se trato de hacer la pelea sin llegar a un arreglo, el Principal punto de Floyd era que le exigía exámenes antidoping  de sangre tipo olímpicos a Pacquiao, este ultimo los rechazo argumentado tenerle miedo a las agujas, pero las excusas ya se acabaron, no había porque no hacer la pelea, con una bolsa de 100 millones de dólares no se podían hacer para atrás y no existiría argumento alguno valido para rechazar la pelea, todo estaba listo para el combate que ropería todos los records, el más esperado, el más deseado, Mayweather solo tenía que vencer a Víctor Ortiz y Manny a Márquez, Floyd lo hizo noqueo en 4 rounds a Ortiz, aunque con final polémico y muy decepcionante, golpeando al Mexicoamericano cuando este tenía las manos abajo, algo legal mas no moral.

El turno ahora era de Pacquiao, quien comento que la pelea era algo personal, que no dejaría dudas, que entrenaría como nunca y que haría pagar caro las ofensas de Márquez, su equipo lo secundaba en declaraciones, Freddie Roach su entrenador comentaba que la pelea no duraría más de 6 rounds, que su pupilo era una maquina y no existía forma de detenerla, el preparador físico fue aun más osado al decir que Manny destrozaría en el primer round a Márquez, la pelea parecía simple trámite no había forma de perder, ellos sabían que no podían, algo muy grande los espera después, son muchos los ceros por añadir a sus cuentas bancarias.

Márquez hizo algunos ajustes en su entrenamiento, sobre todo en la parte física, no podía cometer los mismos errores de su anterior visita a los welters, fueron cuatro meses intensos de preparación, pero siempre se le valoro poco y se le daban mínimas posibilidades de victoria, se decía que el declive estaba ahí, que el tiempo no perdona, que la velocidad y los reflejos disminuían, que era demasiado el peso y muchas las ventajas concedidas, recibir un nocaut lucia como algo seguro.

     La pelea en si fue menos intensa que las don anteriores pero en esta ocasión hubo un dominador claro de las acciones, el Maestro Márquez, dio cátedra de boxeo, estratégica y técnicamente fue mas, conecto los mejores y más potentes golpes, dómino a placer a Pacquiao al grado de mantenerlo frustrado y con una esquina que se quedo sin palabras y argumentos que ayudaran a su pupilo a darle vuelta al combate, una y otra vez el Filipino trato de entrar en la guardia del Mexicano pero era recibido por tremendas combinaciones, de rectos, volados y uppers, y por un excelso trabajo de piernas y cintura que hacían que la mayoría de los golpes del Tagalo se quedaran en el aire, el magistral golpeo al cuerpo de Márquez poco a poco le fue cortando las piernas a Manny, los reflejos, la velocidad y movilidad se mantuvieron round tras round, el trabajo de Márquez iba rindiendo frutos, cada vez se miraba la victoria más cerca, por más que Pacquiao intentaba simplemente no podía descifrar a Márquez, el inmenso boxeo de este borro del ring a la fuerza, velocidad y agresividad del Tagalo, al final del doceavo round todo parecía normal con lo visto en el ring, Márquez alzando los brazos en señal de triunfo y un incrédulo Manny que denotaba en su rostro y actitud la derrota, la arena, la prensa y la televisión se rendían ante la exhibición de Márquez, parecía que el resultado de la tarjeta de los jueces era solo tramite, cuando se anuncia una decisión unánime pensamos todo va bien, Márquez fue muy superior, todo el marco era perfecto y justo, todo iba bien hasta el momento que el anunciador menciono el nombre del ganador, si Manny Pacquiao!!!, nadie lo podía creer, los abucheos no se hicieron esperar, los gritos de robo! robo! inundaron el lugar, un desencajado y frustrado pero aplaudido Márquez abandona el ring sin dar declaraciones, mientras que un abucheado, exhibido y desacreditado Manny Pacquiao se quedaba en el centro del ring dando incoherentes declaraciones, el atraco boxístico se había dado.

Márquez aun perdiendo y con su magistral trabajo tirado por la borda fue el ganador, obtuvo el reconocimiento de la gente en la arena, de los conocedores, de los analistas, de muchos boxeadores, del publico en general, todos ven en Márquez al hombre que pudo derrotar a Pacquiao y que fue injustamente despojado del triunfo, esa noche perdió el boxeo y ganaron los intereses de unos cuentos que día a día denigran mas este bello deporte y aunque parezca algo ilógico, a Manny Pacquiao le hizo más daño ganar la pelea de esta manera que haber perdido.
  
Con los momios a favor y la pelea más importante y lucrativa de los últimos tiempos en la sala de espera, con Bob Arum atrás de todo, con la fecha del 5 de mayo del 2012 reservada y la ciudad del pecado como escenario, simplemente no se podía perder, esa noche pasara lo que pasara arriba del ring Manny Pacquiao nunca iba a perder….

Ivan Rios, Ring Side….

martes, 8 de noviembre de 2011

Nos cambiaron al perro

Debo admitir que Alfredo “El Perro” Angulo  es uno de mis boxeadores favoritos, su aguerrido y  valiente estilo lo hacen ir siempre al frente, no importándole lo que recibe sino los golpes que le da a sus rivales, “El Perro” es un peleador espectacular que deja todo en el Ring, no escatima en esfuerzo y corazón, pero este pasado sábado en su pelea con el Norteamericano James “ Mandingo Warrior” Kirkland en Cancún México, me he llevado tremenda decepción, cierto que Angulo es un peleador limitado, unidimensional, de pobre defensa y muy lento, pero todas esas carencias las suplía con tremendo coraje, presión, fuerza, aguante, determinación, pero sobre todo las suplía con su pegada demoledora, que en varias ocasiones cuando era superado le salvo peleas, pero esa noche,  ese Perro no estaba ahí, fue otro el que subió al ring, nos lo han cambiado, no es el mismo de anteriores peleas, no sé que le paso, no fue ni la sombra de otras guerras, tal vez fue la inactividad quien mermo abruptamente sus condiciones, dos rounds boxeados en los últimos 17 meses debido a sus problemas de Visado,  o tal vez fue una muy mala preparación, en el pesaje del día anterior se miraba realmente mal, al parecer dar el peso fue un infierno para el de Mexicali, o quizá fue el cambio de esquina, Don Nacho Beristaín su nuevo entrenador trato quizás a estas alturas de cambiar algo al estilo de Angulo, al parecer el Maestro Veracruzano le quito fiereza al boxeo de Angulo,  o quizás fue la suma de todos estos factores que no dejan de ser meras suposiciones, los hechos nos dicen que fueron los golpes de Kirkland los culpables de la debacle del Mexicano, aunque los hechos también nos dicen que un boxeador profesional no puede vaciarse y dejar todo en el ring en el primer round.

Precisamente en ese primer round se escribió la historia de esta pelea, a los pocos segundos de iniciado el combate, Angulo deposito en la lona a Kirkland, al levantarse este, Angulo se abalanza como es su costumbre sobre su rival para tratar de terminarlo, parecía el principio del fin para el peleador moreno, pero nada más lejos de la realidad, fue el fin pero del boxeador Mexicano, que en su afán de arrancarle la cabeza a su oponente, gasto las pocas o nulas energías que traía, al final del round se quedo sin fuerzas y fue su rival quien aprovecho y tomo las riendas del combate, mandando a “El Perro” a la lona, quien fue salvado de manera milagrosa por la campana.

El nocaut fue decretado en el sexto round pero durante cinco round un tercio vimos a un
Angulo desconocido, sin fuerza, sin aliento, sin aguante, sin piernas, sin estamina, sin nada, desorientado, daba pena, era apenas el segundo round y parecía que llevaba quince rounds peleados, durante todo ese tiempo estuvo noqueado de pie, mas no sé si el estado en que se encontraba era por los golpes de Kirkland o por su nula condición, incluso cuando tuvo mal a Kirkland en el primer round y lo quería terminar se le notaba la falta de fuerza en sus golpes, el anterior Perro el que conocíamos no dejaría pasar la oportunidad y le hubiera recetado tremendo nocaut a su oponente.

Espero que el anterior Perro regrese, tal vez un entrenador como Rudy Pérez o un Capetillo le serian de mucha mas ayuda en su carrera que el maestro Beristaín, que está comprobado que si él no formo al boxeador en muy poco le ayuda (Travieso, De la Hoya, Chávez) “El Perro” necesita de un entrenador que magnifique sus fortalezas y que explote esas virtudes físicas,  y no que le enseñe tanto técnicas boxísticas, a estas alturas de su carrera difícilmente aprenderá algo nuevo.

Por cierto de todo lo anterior mencionado en nada tiene la culpa Kirkland que hizo una estupenda pelea y gano de forma contundente, estuvo en la lona y a punto de ser noqueado, se levanto para recetarle una paliza a su oponente, va una felicitación y nuestra admiración para él.

Ivan Rios, Ring Side….

lunes, 24 de octubre de 2011

Omar Narvaez, el que espera desespera....

El púgil Argentino tenía todo para llenarse de gloria y entrar a la elite del boxeo, tenía todo para dejar atrás las efímeras bolsas ganadas y empezar a cobrar realmente lo que su calidad boxística amerita, tenía todo para lograrlo menos la intención de ganar, ni siquiera la intención de brindar un digna pelea….perdón ni siquiera presento pelea.

Siempre se le critico a Narváez de localista, la mayoría de su carrera la ha llevado a cabo en su país natal y sus escasas salidas fueron a Europa, nunca había peleado en EEUU, se le ha tachado de conformista, a pesar de ser un doble campeón mundial con muchas defensas sus bolsas han sido raquíticas, por eso cuando se confirmo la noticia de que enfrentaría al tremendo boxeador Filipino Nonito Donaire, no lo podía creer, pensé esta es la mejor oportunidad del Argentino de mostrarse al mundo y de demostrar lo buen púgil que es, acepto un gran reto, una misión casi imposible, pero tenía ante sí la gran oportunidad y el gran escaparate. La tan ansiada pelea de su vida por la que tanto tiempo espero  al Argentino le llego, tenía todo para brindar una gran exhibición, tenía a la televisión, la mejor bolsa de su vida, a la prensa, a los aficionados y al mejor rival, el marco era perfecto.

Pero lejos de aprovechar su gran noche, tiro todo por la borda, prefirió entregar nada y salir limpio, que entregarlo todo y tocar aunque sea esa noche el cielo boxístico. Narváez tiene el boxeo y la inteligencia suficiente para haberle hecho pasar una mala noche al Filipino, pero en lugar de eso salió solo a cobrar, se olvido de los fanáticos y de donde estaba peleando, se dedico única y exclusivamente a sobrevivir, a evitar en todo momento la pelea, se limito solo a defenderse y olvido por completo lanzar golpes, no gano un solo round, no complico un solo round, no emociono un solo round, no estuvo un solo round.

Era desesperante ver el accionar del Argentino, ver como la pelea avanzaba y el no mostraba la mínima intención de combatir, nunca quiso competir, nunca por su cabeza paso la idea de ganar, una sesión de sparrings hubiera emocionado mas, esa noche el Argentino olvido todo lo que lo había llevado a estar en ese escenario y dejo pasar la oportunidad de su vida, hoy no creo que alguna televisora fuera de Argentina este interesado en volverle a dar la oportunidad, Narváez esa noche se puso los guantes, subió al ring, no peleo, cobro y se fue para ya no volver a pelear en EEUU.

Clafher, Ring Side, Tijuana….